En "Have A Little Faith: A True Story", el autor Mitch Albom explora el tema de la tendencia de la humanidad a evadir las influencias divinas, atrayendo paralelos a las figuras bíblicas. Adán, que se ocultó en el Jardín del Edén, simboliza el instinto de la humanidad de esconderse de Dios cuando se enfrentó a transgresiones. Del mismo modo, el intento de Moisés de tomar el lugar de su hermano refleja la lucha de las personas para escapar de las responsabilidades ordenadas por la fe.
La experiencia de Jonah, donde aborda un barco y finalmente está envuelto por una ballena, ilustra aún más este motivo de vuelo de las expectativas divinas. Albom sugiere que tales acciones se basan en un deseo humano más profundo de evitar la responsabilidad de Dios. A través de estas historias, subraya la persistente inclinación humana a huir de las verdades espirituales y los desafíos de enfrentar la propia fe.