En "Have a Little Faith: A Reo Story" de Mitch Albom, la narrativa presenta un momento desgarrador cuando un personaje, conocido como el REB, enfrenta las noticias insoportables de la muerte de un niño. El médico entrega el devastador mensaje de que no pudieron salvarla, destrozando el mundo del Reb. Este momento lo obliga a lidiar con la insensatez de la vida y la profunda agitación emocional que acompaña a una pérdida inesperada.
Este trágico evento se refleja en la imprevisibilidad de la existencia, ya que el niño había parecido vibrante y lleno de vida solo unas horas antes. La lucha del Reb al comprender la realidad de la muerte y el cambio abrupto de la esperanza a la desesperación encapsula un profundo dilema existencial. Ilustra el doloroso contraste entre el flujo ordinario de la vida y los eventos duros, a menudo incomprensibles, que lo interrumpen.