La grasa había llegado a su farmacia para organizar una recarga para su medicamento de librio. En un momento crítico, consumió treinta píldoras de librio justo antes de tomar Digitalis, una combinación que podría tener graves consecuencias. Afortunadamente, el farmacéutico reconoció el peligro potencial y se contactó rápidamente a los paramédicos para obtener ayuda.
Este incidente destaca la importancia de la vigilancia y la experiencia en la atención médica, mostrando cómo un farmacéutico conocedor puede desempeñar un papel crucial en la respuesta a las emergencias. Refleja la idea de que si bien la intervención divina es significativa, las acciones proactivas de los profesionales de la salud pueden estar salvando la vida.