Trabajé porque podía controlarlo.
(I worked because I could control it.)
En "Martes con Morrie", Mitch Albom comparte profundas lecciones aprendidas de su ex profesora universitaria, Morrie Schwartz, que enfrenta una enfermedad terminal. Una información clave se centra en la idea del trabajo y el control. Morrie reflexiona sobre cómo participó en el trabajo para obtener una sensación de autonomía sobre su vida, valorando la capacidad de dirigir su propio camino en lugar de estar sujeto a circunstancias externas. A través de sus conversaciones, queda claro que el control es un factor significativo para encontrar el cumplimiento. La perspectiva de Morrie enfatiza que, si bien el trabajo puede proporcionar estructura, la verdadera felicidad proviene de relaciones significativas y adoptando la imprevisibilidad de la vida, en lugar de simplemente buscar el control en el ámbito profesional.
trabajé porque podría controlarlo.
En "Martes con Morrie", Mitch Albom revela cómo Morrie Schwartz veía el trabajo como un medio para obtener el control personal en su vida. Esta perspectiva destaca la importancia de la autonomía y la elección para encontrar un propósito más allá de los límites de un trabajo.