La cita "Todos sabemos cómo ser un niño" de "Martes con Morrie" de Mitch Albom refleja la simplicidad innata y la pureza de la infancia. Sugiere que, como adultos, a menudo perdemos contacto con el espíritu despreocupado, la curiosidad y la alegría sin filtro que definen ser un niño. Esta pérdida puede conducir a una vida adulta más compleja, a veces onerosa, que se aleja de la esencia de lo que significa experimentar la vida con maravilla y apertura.