Karen Horney era una prominente psicoanalista conocida por su desarrollo de teorías sobre neurosis y personalidad. Ella desafió muchas ideas de su tiempo, particularmente las de Freud. Horney enfatizó la influencia de los factores sociales y culturales en el desarrollo psicológico, proponiendo que las relaciones interpersonales juegan un papel importante en la salud mental. Su trabajo subrayó la importancia de comprender a las personas dentro de su contexto social, yendo más allá del énfasis freudiano tradicional en los impulsos sexuales. Horney introdujo la idea de "ansiedad básica", que surge de los sentimientos de impotencia en un mundo hostil. Ella argumentó que los comportamientos neuróticos son estrategias para hacer frente o escapar de esta ansiedad. Esta perspectiva cambió la comprensión de la neurosis de una patología puramente individual a algo que también está socialmente situado. Sus teorías contribuyeron significativamente al campo de la psicología, particularmente en la comprensión de la psicología femenina y las neurosis. Además, el trabajo de Horney inspiró el psicoanálisis feminista posterior al abordar las complejidades de las experiencias de las mujeres. Ella criticó la noción de "envidia del pene" y sugirió que las estructuras sociales crean sentimientos de inferioridad en las mujeres. A través de sus ideas, Horney abogó por una comprensión más integral del desarrollo psicológico que incorpora consideraciones de género y culturales.
Karen Horney fue un psicoanalista pionero que hizo contribuciones significativas a la comprensión de la neurosis y la personalidad. Sus teorías enfatizaron la importancia de los factores sociales y culturales en el desarrollo psicológico, desafiando las opiniones patriarcales que prevalecen en el psicoanálisis tradicional freudiano.
Ella introdujo conceptos como "ansiedad básica", destacando cómo los sentimientos de impotencia influyen en el comportamiento neurótico. Al enmarcar la neurosis como respuesta a las condiciones individuales y sociales, Horney transformó el enfoque de la psicología y las relaciones interpersonales en primer plano en la salud mental.
. La influencia de Horney se extendió al psicoanálisis feminista, donde cuestionó las nociones tradicionales de la psicología de las mujeres. Al abordar las presiones sociales y el impacto del género, su trabajo allanó el camino para teorías psicológicas más inclusivas e integrales.