Ender apoyó la cabeza contra la pared del pasillo y lloró hasta que llegó el autobús. Soy como Pedro. Si me quitan el monitor, seré como Peter.
(Ender leaned his head against the wall of the corridor and cried until the bus came. I am just like Peter. Take my monitor away, and I am just like Peter.)
En "El juego de Ender" de Orson Scott Card, el personaje Ender Wiggin experimenta un momento de vulnerabilidad emocional mientras reflexiona sobre su propia naturaleza. Mientras se apoya contra la pared del pasillo, se siente abrumado y comienza a llorar, lidiando con su identidad y la oscuridad dentro de él. Esta introspección revela su profundo miedo a volverse como su hermano mayor, Peter, conocido por su comportamiento manipulador y despiadado.
La comprensión de Ender de que sin la influencia controladora de su monitor, podría descender a los mismos rasgos que desprecia pone de relieve la lucha interna entre su sentido de sí mismo y el potencial de agresión. Este momento subraya el tema central de la novela, examinando la delgada línea entre los instintos de supervivencia y la integridad moral. El miedo de Ender refleja una exploración más amplia de las cualidades que definen a la humanidad y el impacto de la educación en el carácter de cada uno.