Cada hombre piensa que Dios está de su lado. Los ricos y poderosos saben que es. Jean Anouilh, dramaturgo francés y dramaturgo
(Every man thinks God is on his side. The rich and powerful know he is. Jean Anouilh, French dramatist and playwright)
La cita de Jean Anouilh sugiere que los individuos tienden a creer que el apoyo divino se alinea con sus propios intereses, una noción particularmente frecuente entre las personas con riqueza e influencia. Esto refleja una tendencia humana común a interpretar las creencias religiosas de manera que justifica la dinámica de poder personal o social, en lugar de fomentar la humildad o la igualdad genuina.
La idea destaca cómo la religión puede ser manipulada por los poderosos para mantener su estatus, creando una desconexión entre la integridad moral y el privilegio social. Tal dinámica puede conducir a dilemas éticos e injusticias sociales, lo que finalmente cuestiona la verdadera naturaleza de la fe y la doctrina frente a la ambición humana.