La cita "Del árbol caído, todo el mundo hace leña" de la novela de Barbara Kingsolver "The Lacuna" refleja la idea de que la adversidad puede transformarse en recursos u oportunidades. Así como un árbol caído, una vez una estructura formidable, puede proporcionar leña útil, los desafíos en la vida a menudo conducen a resultados que benefician a las personas de varias maneras. Esto puede significar la resiliencia y la capacidad humana para adaptarse a las circunstancias, convirtiendo los contratiempos en ventajas.
Esta noción se puede aplicar ampliamente, lo que sugiere que incluso ante las dificultades o la pérdida, existe el potencial de crecimiento y utilidad. También enfatiza un aspecto comunitario, destacando cómo la sociedad se beneficia colectivamente de las dificultades individuales. Al utilizar lo que está disponible de estructuras caídas, tanto literal como metafóricamente, las personas pueden fomentar la conexión y apoyarse entre sí a través de tiempos desafiantes.