En su libro "Money, Posesions and Eternity", Randy Alcorn enfatiza que la verdadera fe requiere un compromiso más allá del mero reconocimiento verbal. Sugiere que llamar a Dios "Salvador" no es suficiente si uno no lo abraza como Señor. Esto implica que el discipulado genuino implica seguir sus enseñanzas y vivir de acuerdo con su voluntad.
. La afirmación deAlcorn sirve como una advertencia contra una forma diluida de cristianismo, donde los individuos disfrutan de la salvación sin un verdadero compromiso de obedecer y honrar a Dios en sus vidas. Para comprometerse completamente con Dios, los creyentes deben reconocer su completa autoridad y esforzarse por alinear sus vidas con sus principios.