En "La mujer que caminó bajo el sol", un personaje se involucra en una conversación que resalta su admiración por el fisicalidad de una mujer. Él expresa su afición por su curva, comparándola con la de un colchón cómodo. Este comentario la atrapa y le indica una respuesta puntiaguda de ella.
Ella sugiere que regrese a su propia casa y a su esposa, lo que indica una familiaridad con él y su cónyuge. Esta interacción muestra temas de autoaceptación y las complejidades de las relaciones, reflexionando sobre cómo los individuos navegan por sus deseos y compromisos en la vida.