La cita cuestiona con humor la competencia de un personaje que posee un título en derecho, lo que sugiere que las calificaciones podrían entregarse con demasiada facilidad. Insinúa la incredulidad sobre cómo alguien podría obtener tal grado e implica una falta de respeto por las habilidades de la persona en el campo legal. Este tono crítico enfatiza la idea de que no todas las calificaciones garantizan habilidades o conocimientos.
Al comparar los grados de derecho con los premios que se encuentran en las cajas de cereales, el autor, Alexander McCall Smith, utiliza un enfoque satírico para resaltar los problemas en la educación legal y los diferentes niveles de competencia entre los profesionales. El comentario alegre sirve para provocar pensamientos sobre los estándares y procesos de obtención de calificaciones legales en la sociedad.