Es horrible si lo ves así, dijo Morrie. Es horrible ver que mi cuerpo se desvanece lentamente a la nada. Pero también es maravilloso por todo el tiempo que puedo decir adiós. Él sonrió. No todos tienen tanta suerte.
(It's only horrible if you see it that way, Morrie said. It's horrible to watch my body slowly wilt away to nothing. But it's also wonderful because of all the time I get to say good-bye. He smiled. Not everyone is so lucky.)
Morrie, un personaje en "Martes con Morrie", reflexiona sobre su enfermedad y la dualidad de su experiencia. Reconoce la dura realidad de su cuerpo deteriorado, pero elige centrarse en los aspectos positivos de su situación. Él encuentra valor en la oportunidad de decir adiós, enfatizando que esta oportunidad no es algo que todos experimenten. La perspectiva de Morrie resalta la importancia de cómo interpretamos nuestras circunstancias y hacemos las paces con ellas.
Esta mentalidad fomenta un profundo aprecio por los momentos que tenemos, incluso ante el sufrimiento. La sabiduría de Morrie enseña que es posible encontrar belleza y gratitud en tiempos difíciles. Al elegir una perspectiva positiva, les recuerda a los lectores que la vida puede ser significativa a pesar de sus dificultades, y que cada momento tiene importancia cuando se aborda con amor y conciencia.