El viaje del personaje refuerza la idea del profundo impacto que las palabras pueden tener en las conexiones humanas. A través de sus experiencias, se da cuenta de que las palabras pueden cerrar brechas o ampliar las divisiones, enfatizando que el significado detrás de lo que se dice es más importante que el lenguaje real utilizado. Esta realización resalta el peso emocional y la importancia que la comunicación lleva en las relaciones.
En última instancia, la intención detrás de las palabras de uno es lo que realmente da forma a las interacciones e influye en los sentimientos. Esquivel ilustra que la comprensión y la empatía pueden trascender las barreras lingüísticas, lo que sugiere que la esencia de la comunicación se encuentra en su propósito en lugar de su forma.