En "El club de vendedores extremadamente exitoso", Chris Murray destaca una tendencia común entre las personas a sobreestimar sus capacidades diarias al tiempo que subestima significativamente sus posibles logros durante un período prolongado, como un año. Este error de cálculo puede conducir a la frustración y al fracaso para reconocer el progreso o el éxito.
Murray alienta a los lectores a cambiar su perspectiva sobre el establecimiento de objetivos y la productividad. Al comprender que el progreso sustancial a menudo requiere tiempo y persistencia, las personas pueden establecer objetivos diarios más realistas mientras mantienen una visión de sus ambiciones anuales, fomentando en última instancia un mayor éxito y satisfacción en sus esfuerzos.