No tan desgarrador. Así que fue conmigo después de la muerte de Tom. En retrospectiva, me miro a mí y a mis amigos y creo que a algunos de nosotros se nos ofrecen advertencias tempranas. La muerte de un ser querido, una enfermedad grave, la lucha de un matrimonio o la desesperación de la soledad, tan trágica como lo son estos eventos, sirven para encerrarnos tan claramente como cualquier estructura inteligente de la trama, lo que nos obliga a tomar una decisión. Elijo vivir. Cada día hasta la empuñadura. Quiero abrazar a mis hijos, besar a mi amante apasionadamente, atacar mi trabajo, disfrutar de mis libros y reírme de todo corazón o llorar como un bebé con mis amigos. ¿No es la vida grandiosa?
(not so heartbreaking. So it was with me after Tom's death. In retrospect, I look at myself and my friends and I think that some of us are offered early warnings. The death of a loved one, a serious illness, the struggle of a marriage, or the despair of loneliness-as tragic as these events are, they serve to box us in as clearly as any clever plot structure, forcing us to make a choice. I choose to live. Each day to the hilt. I want to hug my children close, kiss my lover passionately, attack my work, relish my books, and laugh heartily or blubber like a baby with my friends. Isn't life grand?)
El autor reflexiona sobre el profundo impacto de la pérdida, particularmente después de la muerte de un amigo llamado Tom. Esta experiencia, aunque dolorosa, ha llevado a una apreciación más profunda por la vida. El autor observa que tales tragedias, incluidas la enfermedad y la soledad, sirven como recordatorios para centrarse en lo que realmente importa, lo que provoca opciones importantes de vida.
Al abrazar la vida plenamente, el autor elige apreciar las relaciones, comprometerse apasionadamente con el trabajo y encontrar alegría en los momentos cotidianos. Hay una sensación de celebración y gratitud por estar vivo, destacando cómo la adversidad puede conducir a una perspectiva renovada de la belleza de la vida.