Roba el auto del Capitán Black, dijo Yossarian. Eso es lo que siempre hago. No podemos robar el auto de cualquiera. Desde que comenzaste a robar el auto más cercano cada vez que querías uno, nadie deja el encendido.
(Steal Captain Black's car, said Yossarian. That's what I always do. We can't steal anybody's car. Since you began stealing the nearest car every time you wanted one, nobody leaves the ignition on.)
En "Catch-22", Yossarian expresa un enfoque práctico pero moralmente cuestionable para obtener un automóvil, lo que sugiere que robar el vehículo del Capitán Black es su método habitual. Esto refleja una sensación de desesperación y lo absurdo de las decisiones en tiempos de guerra, donde la supervivencia a menudo supera las consideraciones éticas. El comentario de Yossarian enfatiza las longitudes a las que las personas van a navegar por el caos del conflicto.
Sin embargo, su amigo contrarresta esta noción al señalar las consecuencias de tales acciones. Dado que el hábito de Yossarian de robar autos se ha intensificado, ha llevado a las personas a ser más cautelosas, asegurando que no dejen sus autos con el encendido. Este diálogo destaca el efecto dominó de las acciones individuales en un contexto social más amplio, que muestra los desafíos de mantener la moralidad en un sistema lleno de absurdos.