En "Ghost of Chance", William S. Burroughs describe un personaje con rasgos distintivos, enfatizando los grandes oídos que se avanzan y los cautivadores ojos ámbar. Estos ojos no son estáticos; Contienen una pupila que brilla como una joya preciosa, cambiando los colores en respuesta a la luz, mostrando tonos como Obsidian, Emerald y Ruby. Estas imágenes vívidas destacan la presencia y singularidad del otro mundo del personaje.
El contraste entre los atributos físicos y las cualidades fascinantes de los ojos crea una visual intrigante. Los colores cambiantes de la pupila simbolizan la transformación y la complejidad, atrayendo al lector a una comprensión más profunda del personaje. Burroughs usa magistralmente estas descripciones para evocar la fascinación y una sensación de misterio, invitando a los lectores a explorar más la narrativa.