El éxito de cualquier trampa radica en su simplicidad fundamental. La trampa inversa por la naturaleza de su única complicación debe ser rápida y simple aún más simple.
(The success of any trap lies in its fundamental simplicity. The reverse trap by the nature of its single complication must be swift and simpler still.)
La esencia de una trampa exitosa es su sencillez. Una trampa simple a menudo es más efectiva, ya que es más fácil reconocer y reaccionar. Por el contrario, una trampa inversa, aunque tiene una sola complicación, debe ser aún más rápida y más directa en la ejecución. Esto resalta la importancia de la velocidad y la simplicidad en la creación de estrategias engañosas.
En "The Bourne Identity" de Robert Ludlum, este concepto se explora a través de las complejidades del espionaje y la estrategia. La idea sugiere que cuanto más compleja se vuelve una situación, más probable es que falle a menos que mantenga un enfoque claro y una respuesta rápida, enfatizando un equilibrio entre la complejidad y la simplicidad en las trampas.