En el libro "Miramar" de Naguib Mahfouz, las relaciones entre los personajes están marcadas por una cortesía superficial durante las reuniones de desayunos. Esta interacción se caracteriza por meras civilidades, lo que sugiere una fachada de cordialidad en su encuentro social.
Sin embargo, debajo de esta fina chapa, existe una animosidad profundamente arraigada. Los personajes exhiben un odio mutuo que mantienen en silencio, insinuando conflictos no resueltos y agitación emocional, a pesar de sus apariencias externas. Esta dinámica revela la complejidad de las relaciones humanas y las tensiones a menudo ocultas que pueden estar debajo de interacciones aparentemente agradables.