En "Naked Lunch", William S. Burroughs presenta un comentario sorprendente sobre la naturaleza de la justicia y la autoridad. La cita destaca una conversación entre dos jueces, yuxtapone los ideales de equidad con la realidad de la toma de decisiones arbitrarias. Sugiere que cuando la verdadera justicia es inalcanzable, las personas en el poder pueden recurrir a tomar decisiones aleatorias o sesgadas, reflejando las complejidades y defectos dentro de los sistemas judiciales.
La segunda parte de la cita, "Remendy no puede observar obscenidades habituales", implica que existen sentimientos de remordimiento fuera de las normas y expectativas sociales. Esto sugiere que el arrepentimiento personal es una emoción profunda que trasciende la moralidad convencional, desafiando a los lectores a reconsiderar los límites de la ética. Burroughs nos obliga a enfrentar los aspectos más oscuros de la naturaleza humana, provocando un pensamiento crítico sobre la justicia y la responsabilidad.