En "Swift como deseo", Laura Esquivel explora la profunda conexión entre palabras y emociones, destacando cómo pueden transmitir mensajes más allá de sus significados literal. La cita sugiere que las palabras, al igual que el deseo, pueden viajar rápidamente y tener la capacidad de expresar amor incluso en silencio. Esto indica que la esencia de la comunicación trasciende la mera interacción verbal.
Esquivel también enfatiza la idea de las palabras como conductos de energía, comparándolos con el agua, lo que puede transportar mensajes poderosos. La energía del amor se presenta como una fuerza transformadora, que ilustra su capacidad para impactar y conectar a las personas profundamente, lo que sugiere que las verdaderas expresiones de amor pueden ocurrir incluso sin lenguaje hablado.