Escribiendo en Pushkin, Nabokov observó una vez con bastante precisión que su sujeto era la triple fórmula de la vida humana: la irremisión del pasado, la insaciabilidad del presente y la imprevisión del futuro.
(Writing of Pushkin, Nabokov once observed quite accurately that his subject was the threefold formula of human life: the irretrievability of the past, the insatiability of the present, and the unforeseeability of the future.)
La reflexión de Nabokov sobre Pushkin destaca una comprensión profunda de la experiencia humana, destilada en tres aspectos clave. La irremisión del pasado sugiere que una vez que se pierden los momentos, no pueden ser reclamados, dando forma significativamente a nuestros recuerdos y experiencias. La insaciabilidad del presente habla de los interminables deseos y necesidades que mantienen a las personas que se esfuerzan hacia adelante, lo que a menudo conduce a una sensación de anhelo no cumplido.
Por último, la incansabilidad del futuro subraya la imprevisibilidad inherente a la vida, dejando a las personas para navegar por la incertidumbre. Juntos, estos elementos encapsulan las complejidades de la existencia y revelan la intrincada relación entre nuestro pasado, presente y futuro, como se analiza expertamente en la exploración de Boyd de estos temas.