La lucha del personaje en "Catch-22" de Heller destaca un defecto humano común: la tendencia a ignorar los consejos y las advertencias de los demás. Su admisión de no escuchar demuestra un tema más profundo de orgullo o terquedad, lo que finalmente conduce a consecuencias problemáticas. Este momento refleja un comentario más amplio sobre la importancia de prestar atención a la sabiduría de quienes nos rodean.
Esta escena refuerza la idea de que el incumplimiento de la atención a la orientación puede resultar en situaciones terribles. La renuencia del personaje a encender sus faros sirve como una metáfora de los peligros de ignorar las ideas cruciales, lo que sugiere que a veces la humildad y la apertura a los consejos son esenciales para navegar por los desafíos de la vida.