En "The Time Keeper" de Mitch Albom, el peso emocional de la angustia se ilustra poderosamente a través de la metáfora de un corazón que se divide en dos. Las imágenes transmiten cuán profunda puede sentirse la tristeza, comparando la experiencia con un avión estrellado, destacando la intensidad del dolor y la lucha que acompaña a tal pérdida.
El viaje de Sarah de regreso a su habitación simboliza un retiro en la desesperación, mientras lidia con sus restos emocionales. La referencia a un agujero profundo y oscuro significa no solo su tristeza, sino también el aislamiento que a menudo sigue una angustia, enfatizando las batallas internas que uno enfrenta durante los tiempos difíciles.