Todos los animales son iguales, pero algunos animales son más iguales que otros.
(All animals are equal, but some animals are more equal than others.)
La "granja de animales" de George Orwell explora el tema de la igualdad y la hipocresía que a menudo acompaña al poder político. La famosa cita, "Todos los animales son iguales, pero algunos animales son más iguales que otros", ilustra cómo los que tienen autoridad manipulan el concepto de igualdad para mantener el control sobre los demás. Destaca las contradicciones inherentes a los regímenes totalitarios, donde la clase dominante hace cumplir las reglas que se privilizan a expensas de las masas.
Esta declaración sirve como una poderosa crítica de la forma en que el lenguaje y la ideología pueden distorsionarse para justificar la opresión. El trabajo de Orwell muestra cómo los ideales revolucionarios pueden ser corrompidos, lo que lleva a una sociedad donde la supuesta igualdad de todos los animales es traicionado por la naturaleza egoísta de la élite. En última instancia, enfatiza los peligros de permitir que el poder no se controle y la facilidad con la que se pueden subvertir los ideales nobles para obtener ganancias personales.