En "The Time Keeper" de Mitch Albom, la narración explora el miedo único que enfrentan los humanos, particularmente el miedo al paso del tiempo y el final eventual de la vida. Este miedo se representa como una emoción debilitante que distingue a los humanos de otras criaturas, que no perciben el tiempo de la misma manera. Subraya el temor existencial que proviene de la conciencia de la mortalidad y la naturaleza fugaz de la existencia.
El viaje del protagonista implica enfrentar este miedo y comprender su profundo impacto en la humanidad. A través de esta exploración, la historia revela cómo la obsesión con el tiempo puede conducir al sufrimiento y a una sensación de urgencia paralizante. En última instancia, alienta a los lectores a reflexionar sobre su relación con el tiempo y la importancia de vivir plenamente en el presente en lugar de ser consumidos por el miedo a lo que se avecina.