En la narración, el nacimiento del sol y la luna en Teotihuacan significa el surgimiento de la humanidad de la oscuridad a la luz. Este evento se representa como una profunda metamorfosis, revelando que la iluminación ofrecida por estos cuerpos celestes trasciende el mero brillo físico. El conocimiento transmitido de los antepasados enfatiza una dimensión espiritual, lo que sugiere que su luz influye en el tiempo y el espacio, dando...