De vez en cuando corres en uno de esos días cuando todo está en vano ... un fastidio de piedra de principio a fin; Y si sabes lo que es bueno para ti, en días como estos te agachas en una esquina segura y un reloj.
(Every now and then you run up on one of those days when everything's in vain … a stone bummer from start to finish; and if you know what's good for you, on days like these you sort of hunker down in a safe corner and watch.)
En "Fear and Loathing in Las Vegas", Hunter S. Thompson reflexiona sobre esos días desafiantes cuando nada parece ir bien, describiéndolos como un "fastidio de piedra". Estos momentos pueden sentirse abrumadores e inútiles, lo que nos lleva a reconsiderar nuestras acciones y opciones. Sugiere que durante esos tiempos, es aconsejable retirarse a un espacio seguro en lugar de enfrentar las luchas de frente.
Esta perspectiva invita a los lectores a reconocer la realidad de los malos días y la importancia de la autoconservación. En lugar de luchar contra la adversidad, Thompson aboga por un enfoque más pasivo y observador, permitiéndose encontrar consuelo en la quietud en lugar del caos. Abrazar los momentos de retiro puede ofrecer claridad y protección frente a los desafíos impredecibles de la vida.