En una sociedad cerrada donde todos son culpables, el único crimen es ser atrapado. En un mundo de ladrones, el único pecado final es la estupidez.
(In a closed society where everybody's guilty, the only crime is getting caught. In a world of thieves, the only final sin is stupidity.)
La cita del "miedo y el odio en Las Vegas" de Hunter S. Thompson destaca la ambigüedad moral de una sociedad donde las irregularidades son generalizadas. En tal entorno, ser "atrapado" se convierte en el delito principal, eclipsando los crímenes reales cometidos. Esto sugiere una crítica de las normas sociales donde la culpa es universal, y el sistema castiga la visibilidad en lugar de irregularmente a sí mismo.
Además, la declaración implica que en un mundo lleno de engaño y traición, la ignorancia puede ser el peor paso en falso. La estupidez aquí representa una falta de conciencia o conocimiento para navegar este reino engañoso, posicionándolo como la última locura para cualquier persona que busque supervivencia en un paisaje corrupto. Esta perspectiva invita a la reflexión sobre la naturaleza de la moral y las consecuencias de vivir en una sociedad deshonesta.