Me dio un batido final. De acuerdo, Kemp, dijo con una sonrisa. Muchas gracias, llegaste como un campeón. Demonios, dije, comenzando el motor. Todos somos campeones cuando estamos borrachos.
(He gave my hand a final shake. Okay, Kemp, he said with a grin. Thanks a lot – you came through like a champ. Hell, I said, starting the engine. We're all champs when we're drunk.)
En "The Rum Diary" de Hunter S. Thompson, el protagonista comparte un encuentro que captura la esencia de la camaradería, especialmente bajo la influencia del alcohol. Un apretón de manos entre dos personajes significa apreciación y respeto mutuo, destacando un momento de conexión y sinceridad en medio del caos de sus vidas.
El protagonista reflexiona sobre la naturaleza de la embriaguez, lo que sugiere que la embriaguez saca una sensación de confianza y valentía en todos. Su comentario sobre ser un "campeón" cuando borracho significa que el alcohol puede distorsionar las percepciones y elevar los momentos ordinarios a algo más grandioso, combinando el humor con una sensación de verdad fugaz en sus juergas.