La cita refleja una profunda sensación de decepción que siente el hablante, que deja una situación cargada por los sentimientos de desánimo. Destaca una desconexión percibida entre las mujeres poderosas, lo que sugiere que muchos no priorizan el apoyo o el elevador de otras mujeres en sus vidas o carreras.
Esta observación plantea preguntas sobre solidaridad y tutoría entre las mujeres en posiciones de influencia. El autor, Jean Sasson, subraya la necesidad de que las mujeres aboguen mutuamente, enfatizando que el verdadero empoderamiento implica un compromiso compartido de levantar a otros en lugar de aislarse de la comunidad.