En las revistas finales finales de William S. Burroughs, explora el complejo tema del amor, cuestionando su esencia e importancia. Él percibe el amor como una fuerza innata que trasciende la mera emoción, lo que sugiere que tiene una calidad más profunda, casi mística, que influye en nuestras vidas.
Burroughs también compara el amor con el analgésico más efectivo, enfatizando su poder para calmar y sanar. Esta perspectiva destaca el papel del amor para aliviar el sufrimiento emocional y psicológico, posicionándolo como una experiencia humana fundamental que ofrece consuelo en medio de los desafíos de la vida.