No es el fracaso, sino la mala puntería lo que constituye un crimen.
(Not failure but low aim is crime.)
En "The Anne Stories" de L.M. Montgomery, la cita "No es el fracaso sino la mala puntería el crimen" enfatiza la importancia de las aspiraciones en la vida. Sugiere que tener ambiciones modestas es más perjudicial que no lograr metas elevadas. La protagonista, Anne Shirley, encarna esta mentalidad mientras persigue sus pasiones y sueños, demostrando que luchar por la grandeza es vital para el crecimiento y la realización personal.
A través de sus aventuras, Anne aprende que establecer expectativas bajas puede provocar falta de motivación y disminución del potencial. La narrativa anima a los lectores a elevar sus ambiciones y aceptar desafíos, reforzando la idea de que las metas deben ser ambiciosas e inspiradoras, en lugar de limitadas y aburridas. Esta perspectiva no sólo moldea el carácter de Anne sino que también inspira a quienes la rodean a alcanzar mayores alturas.