En "The Glass Castle", Jeannette Walls representa sus experiencias de la infancia con una familia disfuncional única. Su madre observa que Jeannette está comenzando a mostrar una tendencia hacia el sarcasmo, lo que indica un cambio en su personalidad que refleja su respuesta a las difíciles circunstancias que la rodean. Este sarcasmo en desarrollo puede verse como un mecanismo de afrontamiento para navegar los desafíos de su educación.
Este comentario sugiere la compleja dinámica dentro de la familia, donde el humor, a menudo infundido con sarcasmo, sirve como una herramienta para la resiliencia. La racha sarcástica de Jeannette ilustra aún más su capacidad para adaptarse y encontrar luz en situaciones oscuras, característica de su viaje a lo largo de las memorias. A medida que crece, este rasgo se convierte en parte de su identidad en medio del caos de la vida de su familia.