El problema era, por supuesto, que las personas no parecían entender la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto. Tenían que recordar esto, porque si les dejaba que se hicieran funcionar por sí mismos, nunca se molestarían. Simplemente descubrirían qué era lo mejor para ellos y lo llamarían lo correcto.
(The problem was, of course, that people did not seem to understand the difference between right and wrong. They needed to be reminded of this, because if you left it to them to work out for themselves they would never bother. They would just find out what was best for them and they would call that the right thing.)
En "La agencia de detectives de las damas No. 1", el autor Alexander McCall Smith destaca un tema fundamental dentro de la sociedad: las líneas borrosas entre lo correcto y lo incorrecto. La narración sugiere que los individuos a menudo luchan por distinguir el comportamiento ético de las acciones egoístas. Esta confusión lleva a las personas a priorizar sus propios intereses, considerando que son el curso de acción correcto, en lugar de adherirse a un marco moral.
El texto enfatiza la importancia de la orientación moral, lo que implica que sin los recordatorios y la educación adecuados sobre la ética, las personas pueden descuidar sus responsabilidades hacia los demás. Este llamado a la reflexión social sirve como un recordatorio de que una comprensión de la moralidad es crucial para la armonía comunitaria y un mundo justo.