En "Catch-22" de Joseph Heller, Yossarian percibe la noción de banderines como completamente ridículas. Él los ve como símbolos desprovistos de valor real, ya que no acompañan ninguna recompensa monetaria ni mejoran el estado social de uno. A diferencia de los logros tangibles que ofrecen beneficios, estos elogios parecen triviales y superficiales.
La reflexión deYossarian sobre la naturaleza de tales premios revela una crítica de los valores sociales que priorizan la competencia sobre las contribuciones significativas. Para él, estos premios simplemente denotan que alguien se ha destacado en actividades que, en última instancia, tienen pocos importantes para el bien mayor, destacando una desconexión entre el éxito y el verdadero mérito.