Hasta que se vuelvan conscientes de que nunca se rebelarán, y hasta que se hayan rebelado no pueden ponerse conscientes.
(Until they become conscious they will never rebel, and until after they have rebelled they cannot become conscious.)
En "1984" de George Orwell, la declaración captura la paradoja de la conciencia y la rebelión bajo gobernanza opresiva. La población no tiene conocimiento de su subyugación hasta que alcanzan un nivel de conciencia que los obliga a desafiar la autoridad. Este ciclo sugiere que la verdadera conciencia y el deseo de cambio están interconectados, creando una lucha continua para las personas bajo regímenes totalitarios.
La implicación es que sin experimentar rebelión, las personas nunca pueden despertar de su ignorancia, perpetuando su opresión. Por el contrario, solo a través del acto de rebelión pueden comenzar a comprender su realidad y afirmar su autonomía. Esto destaca la profunda conexión entre la conciencia y la acción en la lucha contra la tiranía.