William se despertó una mañana y descubrió que, a pesar de no recordarlo, había enviado un mensaje al Departamento de Solicitudes exigiendo diez mil galones de sueño (concentrado al 73%, con estabilizador de ácido acético). La solicitud fue rechazada, pero alguien de Requisiciones le devolvió una manta y una almohada.
(William awoke one morning to find that ― despite having no memory of it − he'd send a message to the Requisitions Department demanding ten thousand gallons of sleep {73% concentrate, with acetic acid stabilizer}. The request had been rejected, but someone from Requisitions sent back a blanket and a pillow.)
En la historia, William se despierta un día sin recordar haber hecho una peculiar petición al Departamento de Solicitudes. Pidió una enorme cantidad de concentrado para dormir, destacando una necesidad o deseo inusual de descansar. Este giro surrealista añade una capa de absurdo a su situación, mostrando la naturaleza caprichosa de la narrativa.
Aunque le negaron su solicitud del concentrado para dormir, la respuesta del Departamento de Solicitudes fue extrañamente considerada; en su lugar le enviaron una manta y una almohada. Este gesto refleja una mezcla de humor y practicidad dentro de la historia, subrayando las circunstancias inesperadas y a menudo divertidas que pueden surgir en el mundo de William.