Todo lo que ha sucedido es que el público se ha ajustado a la incoherencia y ha sido divertido en indiferencia.
(All that has happened is that the public has adjusted to incoherence and been amused into indifference.)
En el libro de Neil Postman "Amusing to Death: el discurso público en la era del negocio del espectáculo", critica cómo el público se ha desensibilizado por el desorden en comunicación e información. Sugiere que las personas han aprendido a aceptar la falta de coherencia en las discusiones y los medios de comunicación, a menudo encontrando entretenimiento en la confusión en lugar de exigir claridad o sustancia.
Este fenómeno conduce a una sociedad donde disminuye el discurso serio, reemplazado por el entretenimiento superficial. Postman argumenta que este cambio ha hecho que las personas indiferen temas importantes, ya que priorizan la diversión sobre el compromiso significativo con el mundo que los rodea.