Blade, pensó. Lo tragué; Ahora corta mis lomos para siempre. Castigo. Casado con un judío y encadenando con un asesino alemán. Sintió lágrimas nuevamente en sus ojos, hirviendo. Por todo lo que he cometido. Destrozado. "Vamos", dijo, levantándose. 'El peluquero.
(Blade, she thought. I swallowed it; now cuts my loins forever. Punishment. Married to a Jew and shacking up with a German assassin. She felt tears again in her eyes, boiling. For all I have committed. Wrecked. 'Let's go,' she said, rising to her feet. 'The hairdresser.)
En la novela "The Man in the High Castle", un personaje lidia con profundos sentimientos de culpa y desesperación. Ella reflexiona sobre sus complejas relaciones, sintiéndose atrapada por sus elecciones, incluido su matrimonio con un hombre judío y su aventura con un asesino alemán. La metáfora de una cuchilla significa el dolor y las consecuencias de sus acciones, dejándola herida emocionalmente. Mientras llora bien, se enfrenta a su agitación interna pero decide avanzar, lo que indica una necesidad de distracción o un descanso de sus fuertes pensamientos. Ella resuelve visitar al peluquero, mostrando el deseo de cambiar su apariencia o tal vez su estado mental en medio del caos de su vida.
En la novela "The Man in the High Castle", un personaje lidia con profundos sentimientos de culpa y desesperación. Ella reflexiona sobre sus complejas relaciones, sintiéndose atrapada por sus elecciones, incluido su matrimonio con un hombre judío y su aventura con un asesino alemán. La metáfora de una cuchilla significa el dolor y las consecuencias de sus acciones, dejándola emocionalmente herida.
Como lágrimas bien, se enfrenta a su agitación interna pero decide avanzar, lo que indica una necesidad de distracción o un descanso de sus fuertes pensamientos. Ella resuelve visitar al peluquero, mostrando el deseo de cambiar su apariencia o tal vez su estado mental en medio del caos de su vida.