El encantamiento es el medio a través de los cuales podemos acceder a la santidad. El entretenimiento es el medio a través del cual nos distanciamos de él.
(enchantment is the means through which we may gain access to sacredness. Entertainment is the means through which we distance ourselves from it.)
Neil Postman, al "divertirnos hasta la muerte", destaca la distinción de encanto y entretenimiento. Sugiere que el encantamiento permite a las personas conectarse con significados más profundos y una sensación de sagrado en sus vidas, proporcionando un camino hacia experiencias y comprensión significativas. Esta conexión es crucial para el crecimiento personal y comunitario, ya que fomenta la contemplación y la apreciación de los aspectos profundos de la vida.
Por el contrario, Postman argumenta que el entretenimiento sirve como una barrera que distancia a las personas de estas experiencias significativas. Los distrae con placeres superficiales que disminuyen su capacidad para comprometerse con temas serios, lo que lleva a una cultura más centrada en la diversión que en el discurso significativo. Este contraste subraya la importancia de reconocer cómo nuestras elecciones en el consumo de los medios pueden influir en nuestra conexión con lo que es realmente sagrado y valioso.