La cita destaca un defecto crucial en el diseño de marcos regulatorios, especialmente en los sistemas financieros. En lugar de priorizar la protección de las personas de ingresos medios y bajos medianos que son más vulnerables a la explotación, las regulaciones existentes a menudo las han dejado expuestas. Esta supervisión sistémica refleja una desalineación entre los objetivos regulatorios y las necesidades de aquellos en riesgo de ser aprovechados financieramente.
El énfasis en salvaguardar los intereses de individuos más ricos conduce a un entorno en el que los económicamente desfavorecidos se encuentran con protecciones insuficientes. La reflexión del autor en "The Big Short: Inside the Doomsday Machine" aborda este desequilibrio, lo que sugiere que si las regulaciones se crearon con las prioridades correctas, mejorarían la seguridad para aquellos que tienen más probabilidades de ser perjudicados.