Viejo Dios seguro estaba de buen humor cuando hizo este lugar.
(Old God sure was in a good mood when he made this place.)
En "The Rum Diary", Hunter S. Thompson reflexiona sobre la belleza y la vitalidad del mundo a través de la perspectiva de un personaje, enfatizando cómo el entorno natural parece estar diseñado con cuidado y felicidad. La cita sugiere una sensación de asombro y aprecio por las ofertas de la vida, insinuando una influencia casi divina en la creación de un entorno tan cautivador.
Este sentimiento captura la esencia de la novela, donde el protagonista navega por las complejidades de la existencia y la aventura en Puerto Rico. Al atribuir el encanto del paisaje a un poder superior benevolente, Thompson invita a los lectores a considerar la interacción entre la experiencia humana y la belleza circundante que lo define.