Una vez en la vida, durante un momento mortal, uno debe intentar alcanzar la inmortalidad; si no, no se ha vivido.
(Once in one's life, for one mortal moment, one must make a grab for immortality; if not, one has not lived.)
-Sylvester Stallone- enfatiza la importancia de aprovechar momentos decisivos que nos otorguen una sensación de significado atemporal. Sugiere que la verdadera vida implica asumir riesgos y perseguir la grandeza o el propósito, aunque sea por un período fugaz. Desaprovechar esas oportunidades podría significar perderse la oportunidad de experimentar la vida misma en toda su plenitud. Esta idea fomenta la audacia y la disposición a aprovechar la oportunidad de dejar un impacto duradero, recordándonos que nuestros momentos de verdadera importancia son raros pero vitales para una existencia significativa.
