En "Love Over Scotland" de Alexander McCall Smith, el autor observa con humor la tendencia prevalente de la escritura novedosa en Edimburgo, lo que sugiere que si preguntaras, muchos locales afirmarían trabajar en una novela. Esta abundancia de escritores crea una escasez de personajes únicos, lo que lleva a un dilema humorístico para los autores potenciales.
La ironía radica en la idea de que si alguien creara personajes que también son autores, sus historias probablemente reflejarían el mismo fenómeno de la escritura sobre la escritura. Por lo tanto, el ciclo de creatividad se convierte en un bucle autorreferencial, destacando los desafíos y las peculiaridades del mundo literario.