En el libro de Randy Alcorn "Felicidad", enfatiza la importancia de centrarse en los aspectos eternos más que temporales de la vida. Se basa en la enseñanza bíblica de 2 Corintios 4:18, lo que alienta a los lectores a mirar más allá del mundo visible y su naturaleza fugaz. Esta perspectiva ayuda a los individuos a priorizar la realización espiritual y la alegría que trasciende las circunstancias terrenales.
Alcorn argumenta que la verdadera felicidad proviene de comprender y valorar lo que no se ve, como la fe, la esperanza y una relación con Dios. Al cambiar nuestro enfoque de lo material a lo espiritual, podemos encontrar una satisfacción y un propósito duraderos en nuestras vidas, ya que las dificultades temporales que enfrentamos darán paso a las recompensas eternas.