En un momento tenso, el agente Dwight se revela como un agente del FBI, que muestra su identificación a la señorita Baker. Él le informa urgentemente que ella está en peligro inminente. Confundido y aprensivo, Robin cuestiona la fuente de este peligro, buscando claridad sobre lo que se enfrenta.
El agente Dwight evalúa rápidamente la situación y especifica que la amenaza no proviene de un peligro abstracto sino de un individuo específico, que apunta a Creek. Él enfatiza que Creek tiene la intención de dañarla, creando un sentido de urgencia para que Robin se tome en serio su advertencia.