Hay una línea en algún lugar que se traduzca, aproximadamente, 'el mundo es horrible'. Sí, me dije a mí mismo mientras disparaba a través del puente de la bahía, no me importaba lo rápido que conduje, eso lo resume. Eso es alto arte: "El mundo es horrible". Eso lo dice todo. Esto es lo que pagamos a los compositores y pintores y los grandes escritores que hagan: Cuéntanos esto; Al resolver esto, se ganan la vida. Qué visión magistral e incisiva. Qué inteligencia penetrante. Una rata en una zanja de desagüe podría decirle lo mismo, si fuera capaz de hablar. Si las ratas pudieran hablar, haría cualquier cosa que dijeran.
(There is a line somewhere in that translates out to, roughly, 'The world is awful.' Yes, I said to myself as I shot across the Bay Bridge not giving a fuck how fast I drove, that sums it up. That is high art: 'The world is awful.' That says it all. This is what we pay composers and painters and the great writers to do: tell us this; from figuring this out, they earn a living. What a masterful, incisive insight. What penetrating intelligence. A rat in a drain ditch could tell you the same thing, were it able to talk. If rats could talk, I'd do anything they said.)
En "La transmigración de Timothy Archer", Philip K. Dick captura una visión marcada de la realidad con la línea "El mundo es horrible". Este sentimiento resuena con el narrador mientras conducen rápido a través del puente de la bahía, reflejando un cierto nihilismo hacia las luchas de la vida. Sugiere que el arte, en sus diversas formas, tiene como objetivo destilar verdades profundas sobre la existencia, específicamente la profunda insatisfacción con el estado del mundo.
El narrador aprecia el papel de los artistas en la articulación de tales ideas sombrías, señalando su importancia en la sociedad. Sin embargo, hay un giro irónico; La verdad sobre el horror del mundo es tan simple que incluso una rata podría expresarla. Esto lleva a una contemplación humorística sobre la naturaleza de la sabiduría y la comunicación, subrayando la idea de que incluso las declaraciones más profundas sobre la vida pueden provenir de lugares inesperados, como una rata en una zanja de drenaje.