En el grupo de baile sagrado, las mujeres jugaron un papel importante, y entre ellas, se podría abordar discretamente para garantizar que un hombre se mantuviera seguro. Berthea creía que Inglaterra estaba llena de mujeres de apoyo, ansiosas por echar una mano. Este sentido de comunidad fomentó la creencia de que muchas mujeres sintieron un fuerte deseo de ayudar, especialmente dado el desequilibrio demográfico que dejó a algunos sin la oportunidad de ayudar a los hombres necesitados.
La narración destaca la amabilidad innata de las mujeres en la sociedad, ilustrando su disposición a tomar medidas para el bienestar de los demás. La convicción de Berthea refleja un sentimiento más amplio que, a pesar de los desafíos, estas mujeres continuaron buscando formas de contribuir positivamente a su entorno, actuando como una fuente de comodidad y protección.